![]() |
El Reglamento 003 de la Fedegolf, en su página web. |
Para verdades, el tiempo, y no propiamente el periódico. Tan solo una semana después de que se diera a conocer el calendario oficial del PGA Tour Latinoamérica para la temporada 2012, quedó al descubierto otra jugarreta sucia de la Federación Colombiana de Golf en detrimento de los golfistas profesionales del país. Un lío que esta vez puede llegar a tener consecuencias insospechadas, y muy graves, para unos y otros.
El Reglamento 003 de la División Profesional, expedido por la Fedegolf el 17 de diciembre de 2008, y vigente en la actualidad, contiene las normas según las cuales “se reglamentan las diferentes categorías de los profesionales de golf en Colombia y la expedición de sus respectivos carnés”. En los primeros ocho artículos, más tres parágrafos, se relacionan los requisitos que deben acreditarse para solicitar los carnés y luego, en los artículos 9, 10 y 12, se contemplan los supuestos beneficios que se obtienen con el carné de profesional de golf. Veamos:
Artículo 9º.- Beneficios para el jugador profesional. Las personas que hayan obtenido el carné de jugador profesional, tendrán los siguientes beneficios, durante todo el tiempo de vigencia del carné:
1. Participar en los Torneos Abiertos de los Clubes, avalados por la Federación Colombiana de Golf de conformidad con lo dispuesto en la Resolución No. 0850-F.
2. Participar en el Torneo Escuela Clasificatoria que realiza la Federación Colombiana de Golf.
3. Participar en el Abierto de Colombia que realiza la Federación Colombiana de Golf.
4. Participar en el Campeonato Nacional de Profesionales que realiza la Federación Colombiana de Golf.
5. Participar en el Máster Profesional de Golf que realiza la Federación Colombiana de Golf.
6. Participar en las clasificaciones de los Torneos Abiertos avalados por la Federación Colombiana de Golf.
7. Representar a Colombia en el Campeonato Mundial de Golf y en los Torneos Internacionales que determiné la Federación Colombiana de Golf.
8. Acceder al beneficio de seguro de vida que otorga la Federación Colombiana de Golf.
9. Acceder al programa de seguridad social que otorga la Federación Colombiana de Golf (cuando exista).
10. Participar en todos los cursos y clínicas que realiza la Federación Colombiana de Golf.
Para los jugadores profesionales con carné condicional, no aplican los ítems 1 y 7.
¿En qué consiste esta nueva manifestación irregular? En que, hoy por hoy, la Federación Colombiana de Golf no está en capacidad de cumplirles a los jugadores profesionales esos beneficios por los que, de manera muy estricta, les cobró. ¿Por qué? Porque el grueso de jugadores nacionales, pese a tener su carné y cumplir con todos los requisitos exigidos por la Fedegolf, no podrá jugar Abierto de Colombia y el Máster Profesional (ahora llamado Colombian Coffee Classic). Es porque, por decisión de la decorativa junta directiva de la entidad, esos torneos son parte ahora del calendario del PGA Tour y, por ende, los cupos para participar son asignados ya no de acuerdo con la reglamentación de la Fedegolf, sino del circuito estadounidense.
En los dos primeros meses del año, la Fedegolf recolectó algo más de 60 millones de pesos producto de las consignaciones de unos 300 profesionales de golf (jugadores, jugadores senior e instructores), una cifra para nada despreciable. Todos ellos pagaron y están a la espera de que les cumplan los beneficios prometidos. Es más: muchos de ellos, que no están en la elite competitiva, solo tienen previsto participar en el Abierto de su club, el Abierto de Colombia y el Máster Profesional, pues sus vínculos laborales les impiden actuar en otras citas del calendario nacional.
Actualmente, solo hay siete jugadores colombianos clasificados para el PGA Tour Latinoamérica: Óscar David Álvarez, Álvaro José Arizabaleta, José Manuel Garrido, Santiago Rivas, Jesús Rivas, Rafael Romero y Diego Vanegas. Algunos más podrán obtener privilegios en las clasificaciones que se disputarán en Buenos Aires (Argentina), en junio, y Miami (Estados Unidos), en agosto, que otorgarán 35 cupos para la gira regional. ¿Cuántos? ¿5 o 10? El año pasado, por ejemplo, hubo 21 colombianos en el Tour de las Américas, pero está claro que el nivel competitivo del PGA Tour Latinoamérica será más elevado y no todos podrán acceder a los torneos.
Asumamos que el número de representantes nacionales en la gira regional llega a 20, cifra que sería excepcional. ¿Y el resto de los que pagaron el carné de la Fedegolf? ¿Y todos los jugadores senior? ¿Y los instructores que esperaban el Máster Profesional como su única competencia de la temporada? El grave problema es que la Fedegolf expidió una reglamentación, muy estricta, que los jugadores cumplieron a cabalidad para obtener un carné que, supuestamente, les garantizaba unos privilegios. Hoy, está claro, no pueden acceder a ellos, pues la Fedegolf no puede incluirlos en los ‘fields’ de los torneos internacionales; tendrán que ganarse el derecho, algo que no estaba contemplado en un comienzo. Es decir, les cambiaron las reglas de juego a mitad del camino, algo que no solo es incorrecto, sino que en este caso puede ser ilegal.
Peor aún, en el literal K de la Resolución 850-H (Premios y Trofeos), que dicta los parámetros que rigen la organización de Abiertos y Torneos de golf en Colombia, reza lo siguiente:
“La FEDEGOLF y los Clubes harán un descuento del 10 por ciento sobre la bolsa de premios a los jugadores Colombianos, destinados estos fondos para incrementar la bolsa de los torneos de la División Profesional.
“La FEDEGOLF y los clubes harán un descuento del 20 por ciento sobre la bolsa de premios a los jugadores extranjeros, destinados estos fondos para incrementar la bolsa de los torneos de la División Profesional”.
Esta es una norma muy controvertida que los jugadores profesionales no han tenido más remedio que cumplir a regañadientes, y que hoy se convierte en un grave problema para la Fedegolf. ¿Por qué? Porque la gran mayoría de esos jugadores colombianos que resignaron el 10 por ciento de cada premio que se ganaron desde la vigencia del articulito, hoy no pueden disputar esos las bolsas de esos torneos para los cuales se reglamentó el descuento. ¡Terrible! Y, por otro lado, ¿los directivos del PGA Tour son conscientes del descuento para los extranjeros y lo avalaron? ¿O será que ahora también cambiarán las reglas de juego y, para conveniencia de la Fedegolf, derogarán el articulito?
Abogados conocedores de la Ley del Deporte, y que de tiempo atrás han escuchado las quejas de los jugadores profesionales acerca de las reglamentaciones de la Fedegolf, indicaron que este problema podría tener alcances legales. Es porque podría configurarse un fraude, por haberse recaudado dinero a cambio de unos beneficios que, se sabe, no se podrán cumplir. Es algo así como publicidad engañosa, pero con consecuencias más graves. De hecho, se sabe que el tema ya llegó a oídos de altas esferas en Coldeportes, donde se generó gran preocupación, y se están analizando las implicaciones para determinar si es pertinente iniciar una investigación o, mejor aún, intervenir para corregir las irregularidades.
¿Cómo podrían evitarse todos los problemas? Dado que ya está hecho el convenio con el PGA Tour y, por ende, no es posible que la Fedegolf cumpla con los beneficios prometidos, la entidad solo tiene tres salidas posibles: uno, devolver el dinero recaudado por los descuentos de los premios obtenidos por los jugadores en los abiertos nacionales; dos, devolver el costo del carné de afiliación a aquellos golfistas que, habiendo cumplido con todos los requisitos exigidos, no puedan participar en el Abierto de Colombia y el Máster Profesional debido al cambio de condiciones; y tres, implementar dos torneos compensatorios, de idénticas características a estos (es decir, con las mismas bolsas para evitar perjuicios) destinados a los jugadores colombianos. Sería poco menos que un milagro si la Fedegolf opta por alguna de esas tres opciones, pues si algo ha caracterizado a sus administraciones en los últimos 15 años es la soberbia y la terquedad.
Tan preocupante como esta sucia jugarreta de la directiva es, por otro lado, el silencio cómplice de los propios perjudicados, es decir, de los jugadores profesionales. Muchos de ellos ni siquiera se han dado cuenta de las implicaciones de la implementación el PGA Tour Latinoamérica en el país y los que ya son conscientes de los perjuicios prefieren quedarse callados. El argumento que expresan en privado es que ya saben a qué deben atenerse en caso de expresar alguna queja, pues en el pasado reciente la Fedegolf tomó duras represalias contra aquellos golfistas que se atrevieron a criticar su gestión. ‘Silenzio stampa’ es la norma.
Durante el último lustro, la Fedegolf se ha empeñado en emitir comunicados en los que argumenta que apoya el golf profesional en Colombia. Sin embargo, los hechos dicen algo diferente. Para verdades, el tiempo, y no propiamente el periódico.
Hasta la próxima…
No hay comentarios:
Publicar un comentario